Desarrollo de las actividades de mantenimiento preventivas y correctivas a los equipos electromecánicos instalados en la planta 2 de la empresa Italcol

Abstract

La práctica empresarial es, en esencia, una experiencia educativa diseñada para que los estudiantes pongan en práctica los conocimientos teóricos adquiridos durante su formación académica en situaciones específicas de su campo profesional. Además, tiene como objetivo el desarrollo de las habilidades personales y aptitudes de los estudiantes en un entorno empresarial real.

Italcol es reconocida a nivel internacional como una empresa colombiana que se destaca en la fabricación, distribución y exportación de alimentos concentrados diseñados para diversas especies de animales. Además, también se especializa en la venta de materias primas y premezclas utilizadas en la elaboración de estos alimentos. Donde el estudiante debe cumplir con sus respectivas prácticas empresariales de la tecnología electromecánica en un periodo de seis meses en la planta 2 de la empresa italcol ubicada en el municipio de Girón, Santander. Adquiriendo la oportunidad de formar parte del grupo de mantenimiento en el que podrá desempeñar los conocimientos aprendidos y obtener nuevos a lo largo de la práctica.

El presente documento tiene como objetivo registrar el procedimiento en las actividades realizadas en la empresa, donde se evidencia los tipos de mantenimiento utilizados para los equipos electromecánicos instalados alrededor de la compañía, brindando así un apoyo en la zona operativa y garantizando una mejor eficiencia en la productividad.

las prácticas empresariales emergen como una etapa esencial para los tecnólogos electromecánicos, ofreciendo una valiosa oportunidad para fusionar teoría y práctica. A través de la aplicación directa de conocimientos en entornos reales, los estudiantes pueden consolidar habilidades técnicas y abordar desafíos específicos de la industria. Este proceso fortalece la formación académica al proporcionar una comprensión más profunda y práctica de las complejidades del campo electromecánico, preparando a los futuros profesionales para el entorno laboral. El tecnólogo electromecánico debe aprovechar al máximo estas experiencias prácticas durante su formación. No solo se trata de aplicar habilidades técnicas, sino de establecer conexiones valiosas y desarrollar competencias interpersonales. Estas prácticas no solo enriquecen la educación, sino que también facilitan una transición fluida hacia el mundo laboral, equipando a los tecnólogos con las habilidades y el ingenio necesario para enfrentar con éxito los desafíos cambiantes de la industria.